La luneta o parabrisas trasero designa al cristal de la parte posterior del vehículo. Excepto algunos vehículos comerciales, la mayoría de vehículos tienen una luneta trasera. La luneta trasera es importante por varios motivos:
La luneta trasera de un vehículo es mucho más que un cristal. Es un componente importante de la estructura de su vehículo, además de aportar seguridad y comodidad durante la conducción.
Desde 1983, el parabrisas delantero tiene que estar hecho de vidrio laminado (es decir, vidrio con una lámina de plástico que permite que el vidrio permanezca de una pieza en caso de sufrir daños), lo que reduce el riesgo de cortes provocados por trozos de vidrio durante un accidente. Sin embargo, este requisito no se aplica a la luneta trasera de los vehículos. Por este motivo, los fabricantes suelen hacerlas de vidrio templado, que se rompe en miles de pequeños pedazos de vidrio afilados, pero no tanto como los pedazos grandes. Además, este vidrio es más ligero, lo que ayuda a reducir el peso del vehículo y, por tanto, su consumo de combustible sin comprometer la seguridad.
Algunos vehículos de gama alta tienen la luneta trasera de vidrio laminado para mejorar la resistencia contra robos. En cualquier caso, lo más recomendable es no dejar objetos visibles en la parte trasera, especialmente si son valiosos.
Lo más seguro es que no quiera dejar su vehículo al aire libre si la luneta trasera se rompe durante un choque, colisión o robo; deberá llevar el vehículo a un profesional del vidrio como Glassdrive para que la cambie.
Porque Glassdrive es especialista en la reparación y sustitución de lunas de turismos y vehículos comerciales. Glassdrive es una marca del grupo Saint-Gobain, líder en el diseño y fabricación de lunas de coche (Saint-Gobain Sekurit suministra los vidrios para la mitad de vehículos europeos). Trabajamos con todo tipo de vehículos y vidrios.
Solo los profesionales del vidrio pueden cambiar la luneta trasera de su vehículo, y lo mismo sucede con el parabrisas. Pida una cita mediante nuestro servicio de Atención al cliente llamando al 900 501 501 o a través de nuestro sitio web
Pediremos el vidrio a uno de nuestros proveedores (preferimos productos europeos), que normalmente recibiremos en 24 horas. El día de su cita, un técnico desmontará la luna antigua e instalará una nueva. Este proceso solo tarda 3 horas. En ciertas circunstancias, algunos centros de instalación de Glassdrive pueden acudir y realizar la sustitución en la dirección que nos indique.
Las empresas aseguradoras cubrirán el cambio de luneta si tiene contratada la garantía de "rotura de lunas". En este caso, no deberá pagar por la reparación o la sustitución de la luneta trasera. Salvo que su seguro cuente con franquicia o limite de cobertura aplicable a la garantía de “rotura de lunas”.
Si su seguro no incluye este servicio, el técnico determinará con antelación el coste del trabajo mediante un presupuesto.
¡No se preocupe! Glassdrive está concertado como especialista en lunas por las grandes aseguradoras de nuestro país.